La Corona de Adviento

Cuentan que los antiguos germanos, tenían por costumbre en épocas de frio recolectar ramas verdes de hoja perennes, con ellas formaban un círculo y encendían fuego como señal de esperanza en la venida de la primavera.

El círculo es un símbolo de ciclo eterno de las estaciones, mientras que las ramas verdes representan la inmortalidad y la luz del fuego se asemeja a la fuerza del espíritu de vida que renace cada año, aún cuando los días son más oscuros y fríos,

Con el tiempo esta costumbre la tomaron los cristianos como símbolo para celebrar el adviento, y de ahí surgió la corona que hoy conocemos.

Ahora comienza el camino del adviento, es la época del año que conduce al invierno, es un tiempo de espera, los días tienen menos luz y la madre tierra en su interior abriga un nuevo nacimiento de las fuerzas de la naturaleza, que tras el frio invernal volverán a resurgir.

Si tuviéramos que elegir una de entre todas las fiestas familiares del año, estoy segura que la mayoría nos quedaríamos con la Navidad. Sin duda es un acontecimiento familiar especial, y por ello y en particular para los niños, es importante que sepan de antemano lo que está por venir y participen en su preparación.

Reunirse en familia y con amigos para hacer la corona de adviento como nos explica Rita, es una forma entrañable y en verdad diferente de prepararnos para recibir estas fiestas, ya que la corona de adviento es el primer anuncio que nos dice que la Navidad se acerca.

La familia reunida cada noche después de cenar alrededor de la corona acompaña para contar cuentos navideños a los niños sin otra luz que la que irradian las velas encendidas, es una experiencia única. Después en  ese recogimiento los niños se irán a dormir.

Gema Medina

 

 

 

 

Escribe tu comentario